No sé qué
hacer para ser buena gente. ¿Buena gente?
Ya ni sé si lo soy: soy una y varias a la vez.
“Cada uno
de nosotros es, sucesivamente, no uno, sino muchos. Y estas personalidades
sucesivas, que emergen las unas de las otras, suelen ofrecer entre sí los más
raros y asombrosos contrastes” (En:
Motivos de Proteo, by José Enrique Rodó)
Soy del
tipo de individuo que puede escuchar 100 mil veces la misma canción sin
aburrirse. El fragmento del día que más
me gusta es la madrugada. Amo estar sola en mi habitación. ¿Por qué? Porque
puedo pensar y pensar y leer y leer y escribir y escribir y reír y llorar sin
que nadie me interrumpa para preguntar si estoy bien. Y es que, a veces, siento que asusto a las
personas. Hablar de mis sueños, de lo que hago, de lo que pienso, de lo que siento,
de lo que planeo hacer, de lo que me
molesta, de lo que cuestiono es como decirle a mi interlocutor (literalmente) “¡LÁRGATE!”.
“Dejaré mi tierra y mi iré lejos de aquí.”
Unas ganas infinitas de escapar, de volar, de ir al otro lado del mundo.
Desaparecer del mapa por dos años. Si no
tuviera la parte Kantiana, cogería mis libros y me iría. Sin destino fijo, sin
razón alguna, sin planes. Si sigo aquí, me secaré. Correr, huir, escapar. ¿Una
salida facilista? No: estoy 100% segura de que una vez que me establezca en “YASDDF”,
empezaré a sentir nostalgia de mi vida, la que dejé. Seguramente, mi corazón intentará aferrarse a lo perdido hasta interiorizar que "lo que no es querido siempre queda atrás".
Un amor de antes, un amor amarilliento. Al despertar, me acordé de tus palabras, de tu mirada, de tu sonrisa, de ti. El susurro de tu voz va carcomiendo mi paciencia.
"What day is it? And in what month this clock never seemed so alive? I can't keep up and I can't back down. I've been losing so much time" (You and me by Lifehouse)
Escuharte por un minuto con 29 segundos no tiene precio. ¿O sí? Un sol. =) Al colgar, unas ganas infinitas de llamarte, de escribirte, de correr a tus sueños para ocupar su lugar casi nublan mi razón. Tuviste suerte. Mi razón ganó.
En dos semanas, volveremos a vernos. El miedo corroe mis huesos. Una cosa es escucharte e imaginarte y otra verte face to face. Lo bueno de todo es que aceptaste conversar. Por alguna curiosa razón, creí que me dejarías con las ganas.
Por el celular, sonabas súper alegre, feliz y divertido. Es gratificante ver cómo estás creciendo cada día. Nuestro amado Creador está continuando en ti la buena obra que un día empezó. Sin embargo, debo reconocer que hubo algo que me disgustó. Y fue que me trataste como un punto más en tu agenda. No sabía que, en menos de un año, te habías convertido en un hombre tan ocupado e importante. Aunque claro, tú también eres un punto más en mi agenda. Sólo que en mi caso, estás resaltado con lapiceros de colores.
¿Qué que haré cuando te vea? Observarte larga y detenidamente. Sabes, este año de distancia me ha servido para aprender a no depender de ti. Aún no lo has dicho frente a mí, pero ya lo sé. Ya sé que te incomodo, que te daño, que fui una anécdota más en tu biografía. Seguramente, al ritmo que vas, algún día escribirán una. No te preocupes, si me preguntan por ti, yo no diré nada. ¿Eso es lo mejor? Si para ti lo es, entonces, para mi también.
No sé tú, pero yo casi muero en el intento de borrarte de mi vida. Durante un par de meses, funcionaba, pero luego... Una recaída venía. Lo peor de todo era que no había a quién recurrir. ¿Cómo expresar que es difícil olvidar y más aún cuando sientes que para la otra parte olvidarte es como aprender una nueva palabra en inglés: algo fácil y que no requiere el mayor esfuerzo?
"Cause it's you and me and all of the people. Nothing to do, nothing to lose. And it's you and me and all of the people and I don't know why I can't keep my eyes off of you.
All of the things that I want to say. Just aren't coming out right. I'm tripping on words, you got my head spinning. I don't know where to go from here." (You and me by Lifehouse)
Aún hoy, no puedo odiarte, no puedo guardarte rencor. Tener buenas nuevas de ti me hace bien. Quisiera abrazarte, quisiera tomar tu mano , quisiera susurrar en tu oído que eres más que un nombre. Navidad, año nuevo, 30 de abril, 23 de setiembre, 24 de abril...
Te perdono por no haber cumplido la promesa. Somos humanos y como tales podemos equivocarnos.
"All of the things that I want to say. Just aren't coming out right. I'm tripping on words, you got my head spinning. I don't know where to go from here." (You and me by Lifehouse)
Postdata: Este post esta lleno de virus fantasmas. =)
... Notas de compromiso, esperanza, incertidumbre y perfume de varón acompañan mi madrugada. Entre nota y nota, re-aparece una promesa rota. Yiruma, me encanta cuando tocas porque lo conviertes en un presente ausente.
Las palabras de un Filio enamorado y melancólico adormecen mis preguntas. Imaginar una noche sin el "¿por qué?" al que no puedes contestar con otro "Porque..."
Neruda, ¿Por qué me dedicas estos versos?
"Pero siento tu hora,
la hora de que mi vida gotee sobre tu alma,
la hora de las ternuras que no derramé nunca,
la hora de los silencios que no tienen palabras,
tu hora, alba de sangre que me nutrió de angustias,
tu hora, medianoche que me fue solitaria."
"Quiero no tener límites y alzarme hacia aquel astro.
Mi corazón no debe callar hoy o mañana.
Debe participar de lo que toca,
debe ser de metales, de raíces, de alas.
No puedo ser la piedra que se alza y que no vuelve,
no puedo ser la sombra que se deshace y pasa."
"No, no puede ser, no puede ser, no puede ser.
Entonces gritaría, lloraría, gemiría.
No puede ser, no puede ser.
Quién iba a romper esta vibración de mis alas?
Quién iba a exterminarme? Qué designio, qué palabra?
No puede ser, no puede ser, no puede ser.
Libértame de mí. Quiero salir de mi alma."
("Llenate de mí", fragmento de un poema de Pablo Neruda)
El tiempo avanza, avanza, avanza y yo sigo intentando olvidar. Mi parte kantiana me dice que todo fue cerrado, mas las inclinaciones de mi corazón desean ver a aquel que aparece en mis sueños, en mis pesadillas, en mis memorias.
Lo que más me apena es que no puedo manifestar esto que llevo dentro. ¿La razón? Ya sé cuál es el final: un largo silencio que no te dejará actuar. ¿No eres el mismo de siempre?
¿Qué eres para mí? Más que un recuerdo, más que una canción, más que un virus. Una máscara de apariencias nublan el camino.
Dicen que las palabras se las lleva el viento. Las mías siguen aquí. Las tuyas están a mi lado. No tardes, no te demores.
Postdata: No he perdido la costumbre. ¿Recuerdas la diapositiva que hicimos?